Titulo: China: una revolución en agonia
Autor : Róbinson Rojas
Fecha : 1978
Editor: Ediciones Martinez Roca, S.A.
Ciudad: Barcelona
Pais : Espana
ISBN : 84-270-0471-0
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INDICE
Una explicación necesaria 7 [english]
Capitulo 1
Viva Mao Tse-tung, muera la revolucion! 13
La mujer de cien maridos 16
Un cadaver para Hua 27
Que pasa en Shanghai? 41
Los cuatro perros 48
Quien durmio anoche con Chiang Ching? 55
Comites pro Chiang Ching 59
Capitulo 2
La burocracia civil-militar 69
Un desafio teorico 75
El partido 79
Una constante 96
Son galgos o podencos? 114
El gobierno 155
Las categorias 168
Las clases antagonicas 175
Capitulo 3
La lucha por el poder 185
Las comunas populares 187
La catastrofe 208
El otro partido 217
La insurreccion 234
El derrumbe 262
El trauma sovietico 268
El asesinato 278
El X Congreso 297
El nuevo Confucio 304
Contraataque 314
Gatos blancos y negros 325
El XI Congreso 339
Capitulo 4
El pueblo y el marxismo ficcion 353
Ricos y pobres 357
Contra la revolucion 367
Los salarios 372
El marxismo ficcion 376
El ritual 389
Capitulo 5
Burgueses y proletarios del mundo,unios! 397
Los nuevos amigos 407
Los tres mundos 421
Tabla cronologica de la historia de China 437
Notas 447
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China: Una revolucion en agonia/ Robinson Rojas
Una explicacion necesaria
Este libro es el primer fruto de una investigación de trece años,
que comenzó a fines de 1964, cuando tomé contacto por primera vez
con ciudadanos de la República Popular China en la carcel militar
de Rio de Janeiro, Brasil. Desde entonces, tres estancias en esa
nación -las cuales coincidieron con el comienzo de la revolución
cultural proletaria en 1965-1966, la crisis en la lucha por el
poder entre Lin Biao y Chou En-lai en 1970-71, y el dramático
desenlace en 1974-1977, que incluye las muertes de Chou En-lai
y de Mao Tse-tung y el golpe de estado antimaoista encabezado por
Hua Kuo-feng y Teng Hsiao-ping en octubre the 1976-, me han
dotado de una experiencia 'en el terreno' mas o menos completa
sobre el desarrollo contemporaneo de una revolución que agonizó
durante dos decadas.
Este libro pretende demostrar que:
a) una nueva clase dominante se ha apoderado de la sociedad
china: la burocracia civil-militar que surge triunfante en un
sistema socialista cuando el proletariado es incapaz de mantener
y consolidar ese sistema;
b) la revolución china fue una revolución democratico-nacional
dirigida por una alianza entre la pequeña burguesía campesina y
el proletariado, que al intentar pasar a la etapa socialista hizo
surgir en su seno una lucha entre los intentos de
"proletarizarla" o "aburguesarla" (burocratizarla);
c) el partido comunista chino no alcanzó a desarrollarse hasta
convertirse en la vanguardia de su proletariado, y sólo alcanzó
el nivel de una organización política de alianza entre la pequeña
burguesía y el proletariado, donde, naturalmente, las luchas por
el poder, desde la época de Yenan, tomaron la forma de un
"forcejeo" por "proletarizar" el partido por un lado, y por
transformarlo en una organizacion burocrática, gerencial a nivel
nacional, por el otro lado, por parte de la pequeña burguesia que
ocupó posiciones clave en la jerarquía comunista;
d) los líderes políticos del proletariado chino no estuvieron a
la altura de su tarea, y abandonaron a su suerte a esta clase en
el momento que podía haber ganando su más importante batalla por
el poder, en 1967. En este sentido, se puede afirmar que el chino
es un pueblo traicionado por sus lideres;
e) la acción combinada de los factores anteriores, más la presión
de la realidad ideologico-económica de un modelo de sociedad en
que el modo de producción asiatico fue válido por dos milenios,
con toda la presión que los hábitos, costumbres y concepción del
mundo que éste conlleva, sobre todo con la componente de carácter
divino del "Estado protector", han dado origen a un nuevo sistema
social de explotación de las grandes mayorias por parte de una
ínfima minoría, con un Estado policial que busca, dentro de la
estructura facistizante del pensamiento pequeñoburgues, la
creación de una nación todopoderosa que, para serlo, no solo no
vacila en traicionar a las revoluciones antiimperialistas
contemporáneas, sino que, ademas, entra en abierta alianza
militar y económica con lo que generalmente, desde el ángulo
marxista, se denomina "imperialismo norteamericano".
No fue un suceso aislado, por ejemplo, el del 28 de febrero de
1976, del cual la United Press International, en un despacho
fechado en Cantón, daba cuenta así: "El ex president Richard
Nixon llegó a esta ciudad sureña de China el sábado y recibió del
pueblo chino la mayor bienvenida dada hasta ahora...Decenas de
miles de estudiantes y obreros festejaron tumultuosamente a Nixon
y su esposa Pat a lo largo de la ruta entre el aeropuerto "Nube
Blanca" de Cantón y la Casa de Huéspedes en el corazón de la
ciudad...Agentes del servicio secreto y miembros de la seguridad
china tuvieron que arrancar del tumulto al ex presidente y a su
esposa, que casi cayeron a tierra en medio de la muchedumbre...
Después de ser llevado a unas cuantas yardas de la multitud, la
cual saludaba con las manos y aplaudia entusiasticamente, Nixon
se volvió hacia uno de sus intérpretes y le dijo: "Cómo dicen
'gracias' ustedes?". Cuando le dijeron las palabras chinas, Nixon
levantó sus manos con el signo de la V y grito: "Sie sie". La
multitud aplaudió y profirió alaridos aun más altos...".
Tampoco fue un punto de vista aislado el que expresó la unidad
8341 del ejército chino, encargada de la guardia del comité
central, cuando en octubre de 1976, en un artículo escrito
colectivamente en "Renmin Ribao", en homenaje a Mao Tse-
tung, ya fallecido, decía: "Respetado y querido presidente Mao...
Usted nos regalaba frecuentemente plantas de ciruela, semillas
de girasol, frutas y otras cosas que le obsequiaban los huéspedes
extranjeros y las masas populares, y tambien nos ofrecía
calabazas blancas y patatas que usted mismo cultivaba... Cuando
recibia mangos, sandias o tallarines de los huéspedes extranjeros
y las masas populares, solia decir: "Llévenlos a los combatientes
de guardia, que hacen un trabajo duro".
Ambas cosas son producto de una misma tarea cumplida ya por la
burocracia civil-militar que tomó el poder en China: la de
cultivar refinadamente los hábitos mentales de una sociedad
estática durante siglos, controlando la informacion,
transformando el estudio del marxismo en una caricatura, haciendo
del socialismo un remedo de la antigua jerarquizacion imperial,
creando un culto a la personalidad para transformar a Mao en el
emperador-dios -y por lo mismo, pieza en el juego de impedir la
proletarizacion de la revolución-, y llegar así al punto en que
lograron convencer a amplios sectores del pueblo de que "el
imperialismo norteamericano" es ahora un luchador
"revolucionario" y aliado del "pueblo chino" para "liberar a la
humanidad". Del mismo modo, el homenaje fúnebre a Mao de su
cuerpo de guardia tiene sabor a "imperio del centro", donde los
"jefes de estado" extranjeros traen tributo en especie, que el
bondadoso emperador-dios reparte con generosidad a sus súbditos.
Qué ha ocurrido en China? Qué ha ocurrido en una sociedad cuyo
pueblo libró una sangrienta guerra civil para liberarse,
consiguió salir de la miseria y convirtió en realidad, por
momentos, la creación de una sociedad justa, realizando hazañas
en las tareas de la producción y del bienestar colectivo? Tal vez
un texto escrito el 6 de abril de 1966 como editorial en "Renmin
Ribao", cuando la insurrección proletaria quiso destruír la
burocracia-civil militar, aclare ese interrogante: "En la vieja
sociedad, la relación entre los hombres en la producción y en el
trabajo es la que existe entre el gobernante y el dominado. En
la sociedad socialista, la transformación de la propiedad privada
de los medios de producción en propiedad pública cambia
radicalmente ese tipo de relación... y la sustituye por una de
igualdad, ayuda mútua y cooperación entre los trabajadores
comunes. Pero esta nueva relación no se produce automáticamente
con la transformación de la propiedad. Los antiguos sistemas de
administración dejados por la burguesia, los preceptos y formulas
copiados del extranjero, la influencia de las ideas burguesas y
feudales, asi como la fuerza de toda clase de hábitos,
obstaculizan el establecimiento de la nueva relación entre los
hombres bajo el sistema socialista.
"En la sociedad socialista, la nueva relación entre los hombres
se manifiesta de manera concentrada en la relación entre los
cuadros (funcionarios) y las masas. Los cuadros a todos los
niveles del partido comunista y del Estado son servidores del
pueblo y no señores a horcajadas sobre sus espaldas. Entre los
cuadros del partido y del Estado y las masas, la unica distinción
es la que surge de la división del trabajo, y no hay distinción
entre alto y bajo, superior e inferior. Los cuadros deben
hallarse entre las masas como trabajadores comunes y no deben
gozar de ningún privilegio. A fin de llevar cabalmente a la
práctica este principio es necesario colocar al frente la
política proletaria, aplicar estrictamente los principios
socialistas y solucionar este problema en lo ideológico y
mediante sistemas y reglamentos, cambiando por completo la
relación entre los hombres en la producción y en el trabajo dejada
por la vieja sociedad. DE NO SER ASI, PODRIA SUCEDER QUE LOS
CUADROS UTILIZARAN SU PODER PARA COLOCARSE EN UNA POSICION
PRIVILEGIADA Y TOMAR MAS DE LO DEBIDO, O INCLUSO LLEGAR A COMETER
PECULADOS Y MALVERSACIONES Y USURPAR LOS FRUTOS DEL TRABAJO DE
OTROS. EL RESULTADO SERIA EL SURGIMIENTO DE UNA CAPA PRIVILEGIADA
EN DETRIMENTO DE LA PROPIEDAD SOCIALISTA DE TODO EL PUEBLO Y LA
PROPIEDAD COLECTIVA SOCIALISTA... LA PROPIEDAD SOCIALISTA DE TODO
EL PUEBLO Y LA PROPIEDAD COLECTIVA SOCIALISTA SE TRANSFORMARIAN
GRADUALMENTE EN ALGO SUPERFICIAL Y, DE HECHO, DEGENERARIAN EN
PROPIEDAD DE LA CAPA PRIVILEGIADA. TAL FORMA ALTERADA DE LAS
RELACIONES DE PRODUCCION ENTRE EXPLOTADORES Y EXPLOTADOS CREA LAS
BASES PARA UNA NUEVA LUCHA DE CLASES DE NATURALEZA ANTAGONICA.
DE ESTO SE DEDUCE QUE, EN UNA SOCIEDAD SOCIALISTA, DESPUES DE
CUMPLIDA EN LO FUNDAMENTAL LA TRANSFORMACION SOCIALISTA DE LA
PROPIEDAD DE LOS MEDIOS DE PRODUCCION, AUN HAY QUE COLOCAR LA
POLITICA PROLETARIA EN EL PRIMER LUGAR, ESTABLECER Y DESARROLLAR
GRADUALMENTE UNA NUEVA RELACION ENTRE LOS HOMBRES EN LA
PRODUCCION Y EL TRABAJO E IMPEDIR EL SURGIMIENTO DE UNA NUEVA
CAPA PRIVILEGIADA. SOLO ASI ES POSIBLE CONSOLIDAR Y DESARROLLAR
LA PROPIEDAD SOCIALISTA, EXTIRPAR LAS RAICES DEL REVISIONISMO,
EVITAR LA RESTAURACION DEL CAPITALISMO Y ASEGURAR EL AVANCE
CONSTANTE DE LA CAUSA SOCIALISTA".
Diez años después de ser publicado este editorial, la capa
privilegiada daba un golpe de estado y se hacía con todo el poder
en China. En noviembre de 1977, el Museo Militar en Pekin
inauguraba sus salas de exposición "restauradas". Como cierre de
la exposición, una enorme fotografía de Mao Tse-tung estrechando
la mano a Richard Nixon, en 1976, por segunda vez. En el tiempo
transcurrido desde la primera vez, en 1972, el ex presidente
estadounidense habia ordenado sembrar de cadáveres la tierra
vietnamita y el suelo camboyano, habia puesto en el gobierno de
Chile, via asesinato de su presidente constitucional Salvador
Allende, a un grupo de militares que se dedica metódicamente a
matar a quienes siquiera sean sospechosos de "marxistas" y a
instaurar una brutal dictadura que se ha ganado el aborrecimiento
del mundo; además, habia sido obligado a renunciar a la
presidencia de Estados Unidos, ignominiosamente.
Sin embargo, la tarea efectuada por la burocracia civil-militar
no ha podido ser completa. La siembra proletaria en la revolución
china no ha sido estéril. Y actualmente, de manera subterranea,
clandestina y heroica, hay oposición y hay lucha contra los
nuevos mandarines del ex palacio imperial: lucha por la libertad
y por construir una sociedad donde nadie se alimente de la
miseria de otros.
ROBINSON ROJAS
Diciembre de 1977
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Excerpts from Una Explicacion Necesaria
Robinson Rojas, "CHINA. UNA REVOLUCION EN AGONIA", Ediciones
Martinez Roca, Barcelona,1978
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From the Introduction:
This book is the product of a thirteen-year close political
relationship with the Chinese people and the Chinese Communist Party.
This relationship began late in 1964 in a military prison in Rio do
Janeiro, Brazil, where I had long talks with nine chinese citizens
( among them the vice minister for foreign trade and one journalist )
kept under arrest there by the brutal dictatorship led by general
Castelo Branco. After that, I lived in China from 1965 to 1967,
when the cultural revolution began as an attempt of the Chinese
working class to recuperate the leadership of the revolution, then
in 1970-71, which coincided with the power struggle between two
main members of the "new ruling class", Lin Biao and Chou En-lai,
and lastly from 1974 to 1977, which include the passing away of
Chou En-lai, Chu Teh and Mao Tse-tung, the total defeat of the
cultural revolution, the coup d'etat headed by Deng Xiaoping, in
october 1976, and the consolidation of the counter-revolution.
In abril 1977 I was expelled from China...
...In this book I attempt to demonstrate the following:
a) a new ruling class is dominant in the Chinese society. This
new ruling class is a civil-military bureaucracy created
during the process of building socialism, and it will impose
its power upon the whole of society if the working class is
unable to consolidate its political dominance.
b) the Chinese revolution was, in the main, a national-democratic
revolution led by a political alliance including rural and urban
petty bourgeoisie and urban working class. When some members of
this alliance tried to push forward a socialist revolution, a
power struggle and a class struggle were triggered off.
c) the Chinese communist party never reached the stage of
representing the interests of the proletariat, and was in the
main dominated by petty bourgeoise ideology, always resisting
the encroachment of proletarian ideology. Eventually, the
communist party became the core of the new ruling class in a
bureaucratic socialist system.
d) in the early 1970s, the left of the Chinese communist party, led
by Mao Tse-tung and the so-called "gang of four", compromised
with the counter-revolution (led by Chou En-lai and
Deng Xiaoping), providing the conditions for a complete defeat
which occurred in late 1976.
e) the new rulers will try their best to develop capitalist
relations of production in China; they will add, step by
step, individual economic power to their political power, and
then try to create a big capitalist power competing with the old
ones for world domination.
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